by Groder Torres T.
La mayor amenaza de este enfoque,
la del desarrollo territorial, es la política pública orientada al clientelismo
y asistencialismo. Es necesario que cada vez estos estén alejados. Esto supone
cambios no menores. Los tres niveles de gobierno, en sus intervenciones, tienen
que pasar de lo sectorial, administrativo, subsidiario a un rol más promotor y
facilitador con mirada de territorio. No deberían existir recetas, medidas,
planes, proyectos, etc, por igual o ser tratados por igual.
Hasta aquí todo lo indicado, se
escribe fácil. La implementación del mismo enfoque, la del desarrollo
territorial, puede ser complejo porque supone muchas aristas y romper algunos
paradigmas como: el territorio es mucho más que un mapa, los sectores deben
ponerse al servicio del desarrollo del territorio, los actores del territorio
son los implementadores, pasar de lo sectorial a lo multisectorial e
intergubernamental; por último la gobernanza, como una herramienta para
encontrar compromisos, complementar esfuerzos y recursos entre los diferentes
actores del territorio (público, privado, academia y la sociedad civil), es
decir atrás debe haber toda una construcción de una visión nueva sobre como
generar desarrollo de un territorio. Nuevamente, hasta acá se sigue escribiendo
fácil.
Esto nos lleva a formular algunas
preguntas, ¿quién tiene los recursos para resolver los problemas de un territorio,
es decir un distrito, una provincia? ¿a quién le corresponde resolver los
problemas en materia de desarrollo económico de estos territorios? ¿cuál es el
rol de los tres niveles de gobierno bajo el enfoque de desarrollo territorial?
¿existe alguna institución preparada para implementar el enfoque de desarrollo
territorial?
En las siguientes líneas trataré de
hacer una reflexión y el análisis sobre la implementación del enfoque en la
región San Martín.
Para caminar hacia el desarrollo
territorial, tenemos que comprender dos elementos; primero, que los problemas
de un territorio no son exclusivos de la municipalidad, de las empresas, del
gobierno regional o nacional, tampoco de los pobladores. Los problemas del
territorio son de todos, con responsabilidades, unas exclusivas otras
compartidas. Segundo, el camino para su implementación es el dialogo, la
coordinación y la articulación de esfuerzos. Implica gestionar
interdependencias, intereses, sentarse a la mesa de una manera horizontal, sin
que querer o pretender saber todo. Las autoridades, los llamados a liderar los
espacios de gobernanza, no tratar de gobernar a los actores sino al ecosistema
territorial.
En esta lógica parece que se
reduciría el rol de los gobiernos (3 niveles). Lo que debe suceder es que se
vuelvan más facilitadores, promotores, menos intervencionista que termina por
apuntar como responsables únicos de lo que pasa en el territorio, por ejemplo,
aparece la plaga del cacao el responsable es el gobierno ¿y el rol del privado,
de los productores, de las organizaciones, de la sociedad civil, la academia? Entonces,
¿necesitamos gobiernos menos intervencionistas o menos asignadores de recursos?,
la intervención debe ser en lo estratégico, en prioridades, para generar condiciones
con infraestructura habilitante; y siendo facilitador, promotor en lo puntual. Es
decir, liderar el desarrollo territorial como proceso.
Para no quedarnos en lo
conceptual. Aquí algunas medidas concretas, que coinciden varios expertos de la
región en desarrollo territorial, en lo estratégico, a) adecuar la estructura
orgánica (ROF/MOF) para una gestión con enfoque territorial (gestión
descentralizada en los departamentos), b) programas presupuestales alineados a
un desarrollo sostenible, inclusivo y competitivo, c) fondos de garantía para
impulsar actividades económicas alineadas a la biodiversidad de la Amazonía, d)
CIPRIL con mayores montos para departamentos cuyo canon minero es poco, de tal
manera que le permita promover la inversión privada grande en base a las
prioridades amazónicas, e) Programas Nacionales alineadas a los desafíos y
oportunidades de las regiones amazónicas (Ejemplo: agroideas, agrorural,
proinnovate, otros), y f) alinear el proceso de planificación nacional (CEPLAN,
CNCYF) y el sistema de I+D+i (CONCYTEC, INIA, etc)
En lo puntual, si aparece una
plaga en el cacao, hay que resolverlo juntos, autoridades, productores,
organizaciones, comunidades, institutos locales, rondas campesinas, juntas
vecinales y cuanto actor en el territorio. Teniendo como principal herramienta
el dialogo, la coordinación y la articulación no solo de voluntades sino de
recursos humanos y financieros. Todos hacen la “chancha” para resolver el
problema. Vamos a innovar, mejorar la productividad, introducir nuevos métodos para
el manejo integrado de plagas no se puede hacer sin la participación de los
actores privados, sin los proveedores, sin la participación de las autoridades
locales, sin las instituciones de investigación.
Llegado a este punto, y no se
diga que lo indicado solo funciona en la teoría, que la práctica o lo real es
distinto me referiré a los mecanismos como implementar las medidas puntuales.
Lo estratégico lo dejaremos para un siguiente artículo.
En lo puntual, el mayor desafío
para el desarrollo territorial es la dotación de bienes y servicios públicos o
privados a un territorio especifico como una provincia, distrito o comunidad.
Por ejemplo, la de responder a la demanda de las poblaciones rurales para
resolver sus problemas cotidianos, entre ellos, la falta de asistencia técnica,
mercados, proveedores de insumos, control de plagas, bajos precios,
financiamiento, vías de acceso, reforestación, entre otros. ¿Cómo hacer para
que estos bienes y servicios provenientes del sector público o privado
realmente lleguen a los actores directos, a los pobladores en las comunidades?
¿Cómo deben articularse los actores para responder a estas demandas? ¿quiénes
son los responsables?
La región San Martín, tiene
vocación por el dialogo, la coordinación y en cierta medida por la articulación
interinstitucional, es una práctica que se adquirió en los 90s, cuando había la
necesidad de dialogar y coordinar para resolver el problema de los conflictos
armados provocados por el PCP-SL, el MRTA y el narcotráfico. Desde ahí han
evolucionado los espacios o plataformas de dialogo. Actualmente, existe un
modelo de gobernanza, ejemplo para el país, para promover el desarrollo
territorial. Además, tiene carácter de ordenanza regional, la OR 038-2018-GRSM/CR.
En las provincias, en la primera
línea para promover el desarrollo territorial, se ubican las Agencias de
Desarrollo Económico – ADEs (Ex Agencias Agrarias), que, según el ROF del
Gobierno Regional, son órganos desconcentrados territoriales, responsables de
proveer bienes y servicios públicos; así mismo, la de articular acciones con
los gobiernos locales, agentes públicos y privados para potenciar los recursos
y resultados en materia de desarrollo económico. Esto supone, un elevado nivel
de dialogo y coordinación multiactor. Capacidad para planear y priorizar
acciones articuladas o participativas con los actores locales y/o regionales.
¿Qué herramientas de dialogo y coordinación provincial existen y como esta se
vincula con el ámbito regional?
Las ADEs en suma tienen el
contacto directo con la demanda de las poblaciones locales por bienes y
servicios. Manejan las relaciones interinstitucionales, información fresca y
precisa de la situación socioeconómica local, información estadística. Así como
toda la oferta pública de los tres niveles de gobierno. Es el socio más
importante de los gobiernos locales para promover el desarrollo económico.
Juntos tienen la responsabilidad del fortalecimiento de la gobernanza
territorial a través de los Comités Técnicos de Desarrollo Económico
Territorial Provincial- COTEDETP. ¿en la práctica no es así? ¿qué falta?
Los COTEDETP, según la OR 038,
son mecanismos de coordinación y articulación multiactor. Es el espacio para
planificar, intervenir y resolver los problemas locales. No se requieren que
cada demanda, sea gestionada desde niveles superiores, sino buscar la
autogestión, la participación para resolver los problemas. La intervención de
los sectores y del gobierno regional debe darse sobre la base de los acuerdos
de los actores del COTEDETP. En sano lenguaje, buscan el alineamiento del
sector público, la participación de la empresa, la academia y la sociedad civil
en la solución de los problemas locales.
Finalmente, se requiere que los gerentes
y directores públicos manejen mecanismos para implementar el enfoque
de desarrollo territorial, y que se genere voluntad política para hacer cambios
estructurales.